El calendario parroquial de este año, con la imagen de la puerta abierta del templo y del rostro del Crucificado que lo preside, nos invita a «entrar» en la intimidad del Señor y a multiplicar los espacios y tiempos de oración y encuentro con Él. Es una forma más de recordarnos el lema de este curso pastoral: La misión nace de ti, Señor.
